1. ¿Qué es la valentía? La valentía es el hábito de superar temores. Forma parte de la virtud de la fortaleza y se aplica al caso de acometer dificultades cuando la dificultad es el temor.
2. ¿Valentía equivale a chulería? No, no. Las fanfarronadas no son muestras de valentía sino de orgullo o de ganas de bromear. El verdadero valiente no alardea de sus victorias, pues sabe que tuvo miedo y lo venció. Quien nunca tiene miedo no es valiente sino loco.
3. ¿Ejemplos de temores? Hay varios tipos de temores que la valentía debe afrontar:
- El pánico al esfuerzo excesivo es uno de los primeros obstáculos para proponerse metas.
- Existe el miedo a quedar mal en determinados ambientes.
- Hay temor a fracasar en un plan, a poner en peligro la propia comodidad o el bienestar adquirido. Pavor al cansancio, a los disgustos, etc.
- Y también hay miedos basados en invenciones de la imaginación.
4. ¿Beneficios de la valentía? La valentía es necesaria para conseguir metas. Los temores frenan mucho el avance en cualquier proyecto, incluso obstaculizan el primer intento. Sólo los valientes se lanzan en busca de objetivos a pesar de los obstáculos previsibles o imaginarios. Quien se fija demasiado en las dificultades se queda sin el tesoro, por miedo al esfuerzo, al cansancio, al fracaso... Hace falta algo de valentía para intentar superar dificultades.
5. ¿Ejemplos?
- Un matrimonio necesita valentía para hacer las paces porque intuye que va a ser costoso. Sería magnífico conseguirlo, pero...
- Se necesita valentía para enfrentarse a los propios defectos. La mejora en una cualidad es interesante, pero exige superar dificultades; reclama pagar el precio de repetir actos. Hace falta un mínimo de valentía para decidirse a empezar. Un mal estudiante desea en el fondo ser trabajador. Necesita valentía para superar el miedo al esfuerzo previsible.
- Se precisa valentía para acometer grandes empresas.
- Sólo un valiente emprende la búsqueda de Dios y se propone atrapar su Amor. Hace falta valentía para confesarse, para corregirse, para ser sinceros...
6. ¿Hay límites a la valentía? La valentía tiene algunas limitaciones, pues lo principal no es ser valientes sino obrar bien. Veamos:
- La prudencia pone límites a la valentía evitando que se convierta en temeridad, o en actitudes irresponsables. Ejemplo de actitud correcta: "Aunque soy valiente, no pruebo este veneno; mostraré mi valentía en otros casos".
- La valentía debe emplearse para obrar bien. Un terrorista puede ser valiente, pero su valentía es mala. Igualmente no vale decir "tomo droga porque soy valiente"; esto no es valentía sino idiotez, o cobardía por miedo a quedar mal en un ambiente de droga. Más valentía muestra el que huye de allí aunque le critiquen y se burlen. Huir de las ocasiones de pecar no es cobardía, sino sabiduría.
- La valentía no debe usarse como excusa. No vale decir: "Soy valiente y hago lo que me da la gana". La valentía no basta para que algo sea bueno.
7. ¿Cómo ejercitar la valentía? Más ejemplos donde ejercitar la valentía:
- Hablar o exponer algo en público, superando el miedo a quedar mal.
- Mantener las propias convicciones, aunque el ambiente externo sea contrario y puedan surgir burlas o desprecios.
- Muchas veces la valentía se nota en reconocer con sinceridad los propios defectos y decidirse a luchar contra ellos. Proponerse algunos esfuerzos o sacrificios también es prueba y ejercicio de valentía.
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